La verdad no se aprende, se esnifa.

Y si, anduve leyendo los aforismos de Friedrich Nietzsche. Entre las letras que flotaban en un mar de pensamientos, caí, otra vez, en el abismo de mi inconsciente. Nótese, ahora, entre tantos pensamientos, el gran dilema que se me ha presentado.
Con el propósito de desarrollar un tema que me parece interesante abordar y compartir con ustedes., voy a recurrir a una obra de Platón, llamada “El Banquete”, en la que el tema de discusión, es El Amor.
Eros, el amor, es presentado por otros filósofos como un Dios bello, y bueno. Sócrates, personaje central de los diálogos de Platón (con la agudeza que lo caracteriza) pone en cuestión esta representación habitual del amor. Como en éste fragmento:

- ¿Eros, el Amor, es de alguna cosa, ó de nada?...
- De alguna cosa, seguramente.
- Decime si Eros desea la cosa que él ama.
- Si, ciertamente.
- Pero –replicó Sócrates- ¿Es poseedor de la cosa que desea, y ama, ó no la posee?
- Es probable -replicó Agatón- que no la posea.
- ¿Probable? Mira si no es más bien necesario que al que desea le falte la cosa que desea, o bien que no la desee si no le falta. ¿Vos qué decís?
- Yo, lo mismo.
- Muy bien, entonces ¿El que es grande, deseará ser grande, y el que es fuerte, ser fuerte?
- Eso es imposible.
- Porque no se puede carecer de lo que se posee.
- Tenés razón.
- Y si alguno me dijera: Rico, y sano, deseo la riqueza, y la salud; por si consiguiente deseo lo que poseo, podría responderle: “ Posees riqueza y salud, y si vos deseas poseer esas cosas es para el porvenir. Mirá, entonces, cuando decís “deseo una cosa que tengo en el presente” no significa, sino, “deseo poseer en el porvenir, lo que tengo en éste momento” (conservar, sería)
- Entonces – Agregó Sócrates- ¿No es esto amar lo que no se está seguro de poseer, aquello que no se posee aún, y desear conservar en el porvenir aquello que se posee al presente?


El amor, desea la cosa que ama, esto significa que no la posee, ya que nadie desea aquello que ya tiene. Por lo tanto, el amor es amor de alguna cosa, y fundamentalmente de alguna cosa que falta, ya sea porque no se la tiene, ó porque no se está seguro de poseerla, ó porque se la requiere para el futuro (conservarla). Amor es, en éste contexto, sinónimo de DESEO.
Sócrates nos hace concluir que Eros no es un Dios, porque carece de belleza, y de bondad, su importancia radica en que aspira a poseerlas. Por eso es un DAIMON, esto significa, en el mundo griego, un mediador entre los dioses, y los hombres, entre la sabiduría, y la ignorancia, entre lo mortal, y lo inmortal - igual, ¿qué es la muerte, sino una metáfora de tu ausencia corporal? -

Platón se vale de un mito para explicarnos el origen de Eros:

- Penia, la pobreza, es su madre. Ésta se propuso tener un hijo de Poros, Dios de la abundancia. Eros fue concebido el día del nacimiento de Afrodita. De su madre ha recibido por herencia el ser “Siempre pobre y lejos de ser bello, y delicado como se cree generalmente, es flaco, desaseado, sin calzado, y sin domicilio, sin más lecho que la tierra, sin tener con qué cubrirse, durmiendo bajo la luna, junto a las puertas ú en las calles, en fin: Lo mismo que su madre, está siempre peleando con la miseria. Pero, por otra parte, según el natural de su padre siempre está a la pista de lo que es bello y bueno, es varonil, perseverante, ansioso de saber. Aprendiendo con facilidad, filosofando sin cesar, encantador. Por naturaleza, no es ni mortal, ni inmortal."

Concluyendo, a mi manera, remonto a las palabras de mi amiga Simonetta, cuando me dijo que “somos una bola de contradicciones”. Es decir, hoy me encuentro utilizando a manera de sinónimo de Amor, al Deseo. Siendo que hace un tiempo yo planteaba que el deseo, de desear/pretender, en un sentido de posesión, terminaría por quitar la libertad de lo pretendido. Al tenerlo, lo hacemos presos del beneficio que queremos obtener de él, y de alguna manera condicionamos la libertad de ser, por vía libre. Había planteado -hoy sé y siento que no- que al “quitar libertad, o condicionarla” NO SE AMA. Porque amar, es desear la libertad del otro, también.
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También he pensado sobre "la amistad y el amor" que no es una misma cosa, si bien las dos dependen de sí. Porque el amor puede venir solo de una persona, pero la amistad viene de dos. Por ende, (dijo Aristóteles) que si los hombres tuvieran amistad verdadera no necesitariamos justicia, por que la amistad cumpliria aquello. La amistad es como un tesoro que debe tratarse con amor. Y para que el amor se fundamente y perdure debe existir primero la amistad.

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Mis mejores deseos para vos,
te agradezco haber leído,
¡Espero tu comentario!

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Un abrazo,

Jesús
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